¿Cuándo se produce la leche? Guía para la producción de leche materna

Bea Ramos
Bea Ramos
Cuándo se produce la leche

El cuerpo de la mujer es increíble. Desde la concepción hasta el parto, proporciona a tu bebé todo lo que necesita para crecer grande y fuerte. Pero, dependiendo de las circunstancias que rodeen el parto, puede pasar algún tiempo antes de que la leche materna llegue. La buena noticia es que no es raro que las madres experimenten un retraso en la producción de leche materna.

Cada madre es diferente, pero querer dar a su bebé la mejor nutrición y cuidados es algo que todas las madres tienen en común. Pero cuanto más sepa sobre este fenómeno y sobre cómo aumentar su producción de leche, mejor preparada estará para satisfacer las necesidades y la nutrición de su bebé.

¿Cuándo empieza la producción de leche?

En cuanto te quedas embarazada, tu cuerpo experimenta cambios hormonales que animan a tus pechos a empezar a producir leche. El primer paso para preparar los pechos para la producción de leche es la formación de calostro, que suele producirse a lo largo del segundo trimestre, o a partir de las 12 semanas. A medida que se acerque la fecha del parto, es posible que experimente pérdidas de leche. Sin embargo, esto no siempre ocurre, y es perfectamente normal.

¿Qué es el calostro?

El calostro suele denominarse primera leche u oro líquido. Es mucho más espeso que la leche materna normal y está cargado de nutrientes y protección inmunitaria. Este líquido dorado recubre el intestino de tu bebé, ayudándole a producir su primera evacuación intestinal, conocida como meconio.

Durante los primeros días de vida de tu bebé, el calostro es todo lo que necesita para sentirse lleno y saciado. Un poco de calostro da para mucho. Está repleto de anticuerpos, proteínas e hidratos de carbono. Este líquido espeso y amarillento es fácil de digerir para tu bebé, y le ayuda a liberar su cuerpo del líquido amniótico, que puede haber tragado durante el proceso de parto.

Tu primera leche también puede evitar que tu pequeño tenga ictericia, o al menos ayudarle a deshacerse de ella más rápidamente.

Dificultades con el calostro inicial

El calostro es mucho más espeso que la leche madura y puede resultar difícil extraerlo de los pechos. Si no puedes amamantar a tu bebé en la hora siguiente a su nacimiento, puedes expulsar el calostro mediante la extracción manual. Una vez que tu pequeño haya consumido tu suministro de calostro, tus pechos comenzarán a producir leche de transición.

¿Cuándo me llegará la leche después del parto?

Una vez que hayas expulsado la placenta, tus hormonas se dispararán, indicando a tu cuerpo que está listo para empezar a producir leche. Esto debería ocurrir a los 6 días de dar a luz, pero de nuevo, cada madre es diferente. Durante este tiempo, la leche materna debería pasar del calostro a la leche de transición, que tiene más proteínas y una textura más cremosa que la leche madura.

Sabrás que estás empezando a producir leche de transición cuando el calostro amarillento sea sustituido por leche blanca y brillante.

Al cabo de entre 10 y 14 días, la leche de transición empezará a desaparecer, dejando espacio a su suministro de leche madura. La leche madura contiene tanto leche anterior como posterior. La primera es mucho más fina que la segunda, que tiene una textura más espesa y cremosa y un mayor contenido de grasa.

Para asegurarse de que el bebé consume tanto leche materna como leche final, es mejor no cambiarle de un pecho a otro con demasiada rapidez. Si alternas entre los pechos con demasiada frecuencia, puede que tu bebé consuma demasiada leche anterior a la vez.

Señales de que la producción de leche está llegando

A medida que la producción de leche aumenta, notarás un cambio en el peso, el tacto y la temperatura de tus pechos. Deberá sentirlos más pesados, densos y calientes de lo habitual. La congestión mamaria es un signo revelador de la subida de la leche. Esta sensación puede resultar incómoda al principio, pero cuanto más se alimente el bebé, más blandos se volverán los pechos.

En poco tiempo, tus pechos volverán a su forma habitual. Sin embargo, ten en cuenta que esta transición no indica una escasez de leche, sino que tus pechos se han acostumbrado a la lactancia. A medida que tu cuerpo y tus pechos se adapten a estos cambios, notarás que tu leche materna, antes espesa y amarillenta, tiene ahora una consistencia fina y un aspecto lechoso.

Si tus pechos empiezan a gotear por sí solos, es una gran señal de que tu producción de leche ha subido. Durante esta etapa, un buen sujetador de lactancia te será de gran ayuda.

¿Cómo sé si estoy produciendo suficiente leche?

Leche de biberón

La cantidad de leche materna que produce tu cuerpo depende de la frecuencia con la que alimentas a tu bebé. Cuanto más amamante a su bebé o se saque leche, más leche producirá su cuerpo. Para asegurarte de que tu producción de leche está en pleno apogeo, toma nota de las señales de hambre de tu recién nacido y prepárate para alimentarlo a todas horas.

Los siguientes signos indican que estás produciendo suficiente leche para tu bebé.

Tu bebé hace ruidos al tragar mientras se alimenta

Si oye chasquidos o siente dolor, puede indicar que su pequeño no se agarra bien a sus pezones.

Tu bebé toma el pecho entre 8 y 12 veces en un periodo de 24 horas

Según la Academia Americana de Pediatría, lo mejor es alimentar al bebé a demanda. Sin embargo, una buena regla general es amamantar al recién nacido cada 2-3 horas.

Tu bebé moja entre 5 y 6 pañales cada 24 horas

Deberás comprobar los pañales de tu bebé para asegurarte de que su orina tiene un color claro. Si su orina es oscura, podría indicar que está deshidratado.

Tu bebé defeca hasta 4 veces al día

Durante las primeras semanas de vida del bebé, sus heces son blandas y líquidas. Consulta a tu médico si las heces son oscuras y duras.

Tu bebé va ganando peso a medida que avanzan las semanas

Es perfectamente normal que los recién nacidos pierdan hasta un 5-7% de su peso corporal al tomar el calostro. Pero debería empezar a ganar una cantidad saludable de peso una vez que le suba la leche. En pocas semanas, tu pequeño debería volver a alcanzar su peso original al nacer.

Por término medio, los recién nacidos ganan unos 2,5 kg por semana. Para asegurarte de que tu pequeño está ganando el peso que necesita, consulta una tabla de peso del bebé o habla con tu pediatra.

¿Qué puede retrasar la subida de la leche?

Aunque no es imposible, es muy raro que las madres no puedan producir suficiente leche materna para sus hijos. Sin embargo, es mucho más común que las madres experimenten un retraso en la producción de leche, ya que hay muchos factores que pueden retrasar este fenómeno. Sé paciente contigo misma si experimentas un retraso en la formación de leche. Tu cuerpo sabe exactamente lo que tiene que hacer.

Los siguientes factores pueden hacer que se retrase la formación de leche:

Eres una madre primeriza

Los pechos de una madre primeriza pueden tardar hasta 5-6 días en llenarse de leche. Su cuerpo tiene memoria muscular, y su suministro de leche debería llegar antes con futuros embarazos. Aunque no hay que avergonzarse de utilizar leche artificial, puedes tratar de evitarlo intentando amamantar a tu recién nacido lo máximo posible. Si tu bebé toma el calostro, tu producción de leche debería llegar pronto.

Dificultades durante el parto

Si has tenido un parto largo y estresante, has dado a luz prematuramente o te han hecho una cesárea, es posible que tu leche se retrase unos días. Todo, desde la cantidad de líquidos intravenosos hasta los medicamentos que recibiste durante el parto, puede afectar a tu producción de leche. La cantidad de sangre que hayas perdido durante el parto también puede retrasar la producción de leche.

Imposibilidad de dar el pecho una hora después del parto

Hay muchas razones por las que las madres no pueden amamantar a sus bebés después del parto. Si tu pequeño ángel tuvo que ir a la UCI, es posible que no hayas tenido la oportunidad de amamantarlo. Para garantizar la subida de la leche, el especialista en lactancia o la enfermera te ayudarán a dominar la extracción manual.

Dificultades para agarrarse al pezón

La lactancia puede ser muy complicada al principio. Si tienes algún problema con la lactancia, tu suministro de leche puede retrasarse. Habla con tu asesor de lactancia para asegurarte de que tu bebé se agarra con facilidad. Alimente a su recién nacido con la mayor frecuencia posible para fomentar la producción de leche.

Sentirse abrumada o estresada

Dar a luz puede ser muy estresante, especialmente para una madre primeriza, pero sentirse estresada puede retrasar la producción de leche. Una buena forma de desestresarse es tener mucho contacto piel con piel con el recién nacido.

Una afección médica

Numerosas afecciones médicas pueden impedir o retrasar la producción de leche. El síndrome de ovario poliquístico, la obesidad, las enfermedades de la tiroides, los quistes ováricos y la diabetes son causas comunes de retraso en la lactancia. Habla con tu médico sobre tus problemas médicos antes de dar a luz.

Cirugía mamaria o anatomía única del pezón

La falta de tejido mamario puede provocar un retraso en la producción de leche. También puedes tener dificultades para amamantar si tienes una anatomía de pezón poco común.

Como puedes ver en los factores mencionados, hay muchas razones por las que puedes tener un retraso en la producción de leche. Esto es perfectamente normal y la producción de leche debería aumentar una vez que el bebé haya consumido su primera leche, ya sea mediante la lactancia materna o la extracción de leche.

Si está preocupada, hable con su médico, enfermera, pediatra o asesor de lactancia si experimenta un retraso significativo en la formación de leche.

¿Cómo puedo aumentar mi producción de leche?

Es habitual que las madres se preocupen por si están produciendo suficiente leche para sus bebés. Pero sabrá que su pequeño ángel está recibiendo la nutrición que necesita si está ganando peso y llenando sus pañales. Sin embargo, si sientes que no estás produciendo suficiente leche, hay muchas maneras de aumentar tu producción.

Madre alimentando a su bebé

Los siguientes consejos y trucos pueden servir para aumentar la producción de leche.

Ten en cuenta tus necesidades e invierte en autocuidado

El cuerpo no reacciona bien al estrés, y esto es especialmente cierto cuando estás amamantando. Los altos niveles de estrés pueden afectar negativamente a la producción de leche. Muchas madres dicen sentirse estresadas y abrumadas después de dar a luz. Intenta relajarte y disfrutar tomando una ducha caliente, hablando con una amiga por teléfono o dando un paseo.

También puedes mantener el contacto piel con piel con tu bebé. Esto no sólo te ayudará a crear un vínculo con él, sino que hará que tu cerebro libere hormonas de la felicidad, reduciendo así el estrés. Se recomienda el contacto piel con piel, tanto si estás amamantando como si no.

Medita y confía en tu cuerpo

Intenta no dudar de tu cuerpo durante todo el proceso de lactancia. Sé amable contigo misma y agradece a tu cuerpo todo lo que ha hecho. Acabas de realizar un milagro, intenta relajarte y confiar en el proceso.

Bebe mucha agua

Es importante estar lo más hidratada posible durante la lactancia o la extracción de leche. La leche materna está compuesta por un 88% de agua, y deberás mantenerte hidratada si quieres aumentar tu producción de leche.

Come lo más sano posible

Un estilo de vida saludable es de gran ayuda durante la lactancia. Hay muchos alimentos que pueden aumentar la producción de leche. Intenta comer tantos carbohidratos saludables como sea posible. Las frutas están llenas de vitaminas y tienen un alto contenido en agua, lo que puede ayudarte a producir más leche. Pero ten en cuenta que algunos alimentos deben evitarse por completo durante la lactancia.

Amamanta o extrae la leche con la mayor frecuencia posible

Tu pequeño comerá cada pocas horas. Sin embargo, si sientes que no estás produciendo suficiente leche, puedes extraerla entre las tomas para aumentar tu oferta y la respuesta a la demanda. Tu cuerpo debería empezar a satisfacerte a medias una vez que estimules las tomas en racimo.

Palabras finales

La lactancia y la extracción de leche pueden resultar fáciles para algunas madres, pero cada una de ellas es diferente y eso está perfectamente bien. Cuando des la bienvenida al mundo a tu bebé, estarás rodeada de un equipo de profesionales que te guiarán en cada paso del camino. Si experimenta un retraso en la producción de leche o algunas dificultades con la lactancia, sepa que no está sola y que su cuerpo sabe exactamente qué hacer.

Si te preocupa si tu bebé toma o no suficiente leche, enhorabuena, ya eres una madre maravillosa. Intenta no dudar de ti misma durante todo este proceso y consulta a tu pediatra en caso de que tu bebé no alcance sus hitos.

La maternidad no siempre es un paseo por el parque, pero es la experiencia más gratificante y hermosa de todos los tiempos. Le deseamos a usted y a su familia toda la salud y la felicidad del mundo.

¡Puntua este artículo!

5 / 5. Número de votos: 6

2691b77a1ad4f7f12ba041acdb460327?s=150&d=mp&r=g

Pediatra desde 2015, enamorada de mi trabajo. Tengo dos enormes renacuajos y un marido que cocina mejor que nadie.

Máster en Investigación Clínica y Postgrado en Divulgación Científica, también colaboro desde hace años como profesora en varios centros educativos y artículos científicos.

Empecé Revista del Bebé para ayudar a todas las madres y padres que lo pudieran necesitar, y así unifico mis grandes pasiones: los niños y escribir.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *